Los sistemas de grabación láser pueden variar la manera de ejecutar su tarea dependiendo del tipo de maquinaria de la que se disponga, del tipo de diseño, así como también de la superficie del material que se desea marcar. Podríamos señalar por tanto dos tipos de grabado láser:
Grabado láser por rasterización: Este sistema sería el proceso estándar de grabación, donde la imagen a reproducir está formada a partir de píxeles y el haz de luz marca línea por línea, punto a punto. Este método, nos es útil también cuando necesitamos grabar imágenes de mayor tamaño, letras con relleno o madera.
Grabado láser vectorial: La imagen se descompone en líneas y curvas que son trazadas una por una, “vector a vector” grabándose al mismo tiempo a través del haz de luz del láser. A este tipo de grabado láser se le conoce también como “ranurado”, trabaja a mayor velocidad que el anterior y está indicado especialmente cuando se trata de grabar líneas finas.